He aquí las 20 plantas medicinales que no deberían faltar en nuestro botiquín verde:
Romero: Se usa para flatulencias o gases digestivos, problemas intestinales, tos, insomnio, diuresis, hipercolesterolemia, depresión y agotamiento psíquico.
Tusílago: Se usa para la tos, enfisema pulmonar, bronquitis y afecciones respiratorias crónicas.
Manzanilla: Es antidiarréico, digestiones pesadas, regulador del flujo menstrual, eritema solar, insomnio, inflamación de boca o garganta, inflamación de la piel, menstruaciones dolorosas y dolor de cabeza.
Salvia: Sirve para la inflamación, sudoración excesiva, tos, insomnio, nerviosismo y afecciones del aparato respiratorio.
Lavanda: Se usa para el asma, contusiones, desinfección de la piel y la boca, dolor reumático, debilidad, jaqueca, depresión y estados nerviosos.
Melisa: Está indicada para inflamación de boca y garganta, insomnio, dolor de cabeza, anemia, halitosis y afecciones del aparato respiratorio.
Menta: Está indicada para digestiones pesadas consecuencia de acidez de estómago o gastritis, dolor intestinal, inflamación de la boca, halitosis, náuseas, dolor de cabeza, nervios e insomnio.
Milenrama: Su indicación es para el acné, descongestionante de la epidermis, transtornos hepáticos y digestivos, quemaduras, llagas, hemorroides, varices, transtorno biliar y problemas circulatorios.
Caléndula: Es ideal y recomendada para el tratamiento de heridas, quemaduras superficiales, úlceras, picaduras de insectos y acné. También está indicada como antiespasmódico y sudorífico.
Malva: Actúa como un sedante del sistema nervioso pero también se utiliza para las afecciones de vías respiratorias, faringitis, tos, hemorroides, accesos, inflamación intestinal, inflamación de la piel y gingivitis.
Anís: Su uso más frecuente es como correctivo del sabor pero está indicado para flatulencias, transtornos digestivos y problemas bronquiales. Hay que tener cuidado puesto que con dosis elevadas es capaz de originar convulsiones.
Hinojo: Está indicado para la acidez de estómago, flatulencia, afonía, faringitis, bronquitis, tos, fatiga, catarro e inapetencia.
Valeriana: Está indicada para el insomnio, nerviosismo, ansiedad, depresión, asma y algunas contusiones. Además, tiene propiedades neurálgicas y actúa eficazmente contra la jaqueca.
Hisopo: Está indicado para el tratamiento de hematomas, llagas, heridas y quemaduras y para administración oral en asma y bronquitis.
Angélica: Actúa como estimulante del apetito, en la aerofagía o para tratar los espasmos de estómago o intenstino. Además, se emplea para la preparación de licores. Dosis altas son tóxicas.
Comino: Está indicado para los gases intestinales, falta de apetito y alteraciones digestivas en general.
Tomillo: Destacan los tratamientos para: heridas, llagas, inflamación de la piel, halitosis, inflamación de la boca, dolor de cabeza de origen nervioso, faringitis, ronquera, resfriado común, tos y trastornos gastrointestinales.
Cola de Caballo: Se usa para los edemas generaliados, lavar heridas (uso externo sólo), diurético, hemostático y como remineralizante para fortalecer los huesos y las uñas.
Hamamelis: Está indicada para las varices, flebitis, hemorroides, transtornos de la menopausia y actúa eficazmente en los procesos de cicatrización de la dermis, así como propiedades astringentes para el eritema o el prurito.
Orégano: Se usan las hojas y las flores y está indicado para digestiones difíciles, gases, inapetencia, indigestiones, infecciones de garganta y boca, tos y afecciones de las vías respiratorias